Este es un refrán que conocemos hace varios años, que creemos debe de ser parte de todo aquello que nos hace humanos…
“A human life, I think, should be well rooted in some spot of a native land, where it may get the love of tender kinship for the face of earth, for the labors men go forth to, for the sounds and accents that haunt it, for whatever will give that early home a familiar unmistakable difference amid the future widening of knowledge... The best introduction to astronomy is to think of the nightly heavens as a little lot of stars belonging to one's own homestead”.
“Una vida debería estar bien arraigada a su suelo nativo, donde sienta tierna afinidad por la tierra, por sus labores, por los sonidos que la rondan, por lo que destaque a su primer hogar de en medio de la futura expansión del conocimiento... La mejor introducción a la astronomía es pensar en el cielo nocturno como estrellas de nuestro hogar”.
George Eliot (1876)
Mary Anne Evans